Es una de las voces con más experiencia no sólo en el TEC, sino también en el tenis internacional, por su reconocida trayectoria como jugador y entrenador de campeones. Una voz que afirma que la humildad es fundamental en el tenis y él mismo la pone en juego restando importancia a sus méritos deportivos, aunque en 1982 llegara a tercera ronda de Roland Garros, jugara Wimbledon y durante la década de los 80 se enfrentara a jugadores de la categoría de Yannick Noah, Jimmy Connors, Guillermo Vilas, Manuel Orantes e Ivan Lendl. Con este último se retó en cuartos de final del Godó, en un torneo que el tenista checo acabaría ganando por primera vez.
Gabi, como se le conoce en el circuito, fue el entrenador de Arantxa Sánchez Vicario en 1994 y 1995, cuando la tenista barcelonesa ganó Roland Garros y el US Open, y se proclamó número uno del mundo. Se siente afortunado por haber entrenado a jugadores que han jugado muy bien como ella y también Conchita Martínez, Tomás Carbonell, Galo Blanco, Flavia Pennetta y Nicolas Mahut, entre otros. El común denominador de todos ellos lo encuentra en la determinación, la constancia y en no poner nunca excusas. Tras cuatro años entrenando al equipo nacional de Francia y cuatro en la Rafa Nadal Academy, ha vuelto a casa con ganas de aportar su know how al TEC, donde se ha encontrado a un equipo que, para él, tiene algo imbatible en el tenis: las ganas de mejorar.